María Aguilera y Roberto Soria, una pareja de Antequera, están compitiendo en los certámenes de belleza más prestigiosos de Málaga. Mientras María busca la corona de Miss World Málaga 2025, Roberto se presenta como candidato en Mister International Málaga 2025. Juntos, luchan por alcanzar la gloria en sus respectivos concursos, representando no solo a su municipio, sino también sus valores, el esfuerzo y el apoyo constante en cada paso del camino. EL INCONSCIENTE se hizo presente con este reportaje donde indagué lo que implica este tipo de procesos.

¿Cómo se sienten al ser una pareja que está rompiendo estereotipos al competir juntos en estos certámenes? 

María: Nos sentimos muy afortunados y orgullosos de poder romper esos estereotipos. A veces, la gente no espera ver a una pareja compitiendo en el mismo certamen, pero creemos que es una hermosa forma de mostrar que la belleza, el esfuerzo y el trabajo en equipo no tienen género. Estamos felices de ser parte de algo diferente y de representar a todos aquellos que luchan por sus sueños, sin importar las expectativas tradicionales. 

Roberto: Es un sentimiento de orgullo y nos permite mostrar que la dedicación está más allá del género. Nos sentimos felices de ser parte de algo que puede inspirar a otras parejas a seguir sus sueños, sin importar lo que la sociedad espera de ellos. Este tipo de participación muestra que el apoyo mutuo y la equidad son fundamentales.

¿Cómo ha cambiado tu visión del certamen desde que decidiste participar hasta ahora que estás en plena preparación? 

María: Al principio, veía el certamen como una oportunidad para darme a conocer y demostrar mi potencial, pero a medida que avanzaba, me di cuenta de que es mucho más que eso. Es una plataforma para aprender, crecer y conectarme con personas increíbles que también buscan empoderar a otros. Estoy aprendiendo que el certamen es una experiencia de autodescubrimiento y superación personal. 

Roberto: primero fue una forma de desafiarme a mí mismo y probar mis capacidades. Pero ahora que estoy inmerso en la preparación, advierto que más allá de la competición, es un proceso de crecimiento personal. Esto nos permite la reflexión y  aprender a trabajar en equipo. Me está enseñando a ser más consciente de mis fortalezas y debilidades.

Como pareja, ¿cómo vivencian este viaje tan competitivo? 

María: Nos apoyamos de muchas maneras. Roberto siempre me recuerda que disfrute del proceso, no solo del resultado, y me anima a seguir cuando las cosas se complican. A su vez, yo intento que no pierda de vista su motivación y que no se sobrecargue. Es un viaje compartido donde nos cuidamos mutuamente, y eso lo hace aún más especial. Roberto: Nos apoyamos de muchas formas. Siempre tratamos de mantener una comunicación abierta y sincera. Cuando uno de los dos se siente estresado o inseguro, el otro está ahí para dar ese empujón necesario. Nos motivamos para que nunca perdamos de vista el objetivo, pero siempre con el enfoque de disfrutar lo que estamos viviendo juntos.

Como pareja que compite en certámenes de belleza, ¿cómo están gestionando la presión y el enfoque competitivo sin que afecte a vuestra relación? 

María: Lo gestionamos apoyándonos mutuamente. Sabemos que este viaje no es solo una oportunidad para nosotros individualmente, sino también como equipo. Nos motivamos a seguir adelante y tratamos de no perder la perspectiva. Nos recordamos que lo más importante es disfrutar el proceso y que, pase lo que pase, siempre tenemos el apoyo del otro. 

Roberto: Lo primero es que nos damos espacio para ser nosotros mismos. Sabemos cuándo es momento de relajarnos y cuándo es necesario concentrarse. La clave es que siempre estamos juntos, compartiendo alegrías y dificultades. Esto nos permite mantener la calma y no dejarnos llevar por la presión. 

En la historia de los certámenes de belleza, es poco común ver a una pareja compitiendo en los mismos concursos. ¿Qué creen que aporta este factor único a su participación y qué les ha enseñado como pareja? 

María: Creo que este factor único le da un toque especial a nuestra participación. Nos ha enseñado a trabajar juntos en un ambiente que, por lo general, se vive de forma individual. También nos ha permitido tener una perspectiva diferente de los certámenes, ya que estamos compartiendo cada momento, desde los nervios hasta la satisfacción de avanzar. Como pareja, esto nos ha acercado más y nos ha fortalecido. 

Roberto: Es algo realmente único, y nos ha dado la oportunidad de ver el certamen desde una perspectiva completamente diferente. No solo es un reto individual, sino también una experiencia compartida. Nos ha enseñado a trabajar en equipo, a tener más empatía y a valorar aún más los logros del otro. Esta experiencia nos ha unido más y nos ha permitido entendernos mejor como pareja.

Les deseo que apunten alto y logren conquistar Málaga con una belleza que se refleja en sus cuerpos pero que está en el interior del vínculo. 

@mariaaguileraartist

@robertksoriasanchez