El nombre de la obra de teatro Sonata de otoño de Igmar Bergman (versión Veronese) es una metáfora que condensa una puesta de impecable actuación. Nos encontramos ante un problema del orden del amor, aquello que no puede decirse, el desencuentro. Sin embargo, se hace el intento, aunque sea al finalizar la primavera de la … Sigue leyendo →