Santo busca un bolso en su placard, el bolso que lo acompaño tanto tiempo, lo llena con sus cosas de vivir.
Una caja con fotos lo distrae, los recuerdos lo llevan y lo sacan sólo por un momento de ese húmedo departamento.
Un papel doblado prolijamente llama su atención, lo abre y lee: “Un padre es un maestro que se recibió copiándose en los exámenes y ahora tiene que rendir el práctico».
Ordena todo, toma el bolso, agarra las llaves, la mirada estaba atada a sus pensamientos… Tiró el bolso y se acostó.