Si Jean Cocteau se propuso en 1938 desafiar a la maldad y al egoísmo imperante en un período de guerra que motivaba la crítica y el absurdo en el arte, hoy Daniel Veronese nos trae a Los Padres Terribles para poner en cuestión el individualismo brutal que borra las fronteras no sólo de la empatía … Sigue leyendo