Al llegar a la sala la escenografía adelanta al menos una atmósfera agobiante que se confirma ni bien arranca “Por miserere”. La escena comienza en una remisería “Ayelén” con Dora desparramada en el sillón, mirando, sin mirar, televisión. La mesa al lado del sillón está repleta de los desechos que la noche anterior consumió Dora. … Sigue leyendo