
¿Un simpático fabulador o un personaje influyente en los recientes y resonantes hechos de la historia argentina?
Un argentino radicado en Miami (o exiliado, no sabemos) da vida al Fixer que, según su propia definición, es alguien que arregla todo lo que parece imposible arreglar.
Un encuentro casual en un bar tropical con un periodista argentino de visita en la ciudad deriva en revelaciones insospechadas, creándose una particular tensión dramática y poniendo en vilo al visitante que se prestaba a pasar una tarde apacible escribiendo y tomando un café.
La obra nos convoca a conectar con nuestra historia, con nuestro ser argentino. Desde esas ansiadas playas, despojados de la preocupación del día a día, el Fixer y el periodista filosofan y discurren sobre hechos históricos que nos marcaron profundamente.

Edgardo Moreira, en una magistral actuación, compone con gran histrionismo a este “Fixer”. Sagaz y chispeante, este retirado del infierno argentino y descansado en la placidez caribeña abre un diálogo que por momentos resulta risueño y en otros adquiere un tinte de suspenso.
Enrique Dumont, en el rol del periodista, acompaña eficazmente, siendo el contrapunto exacto que escudriña e indaga a este intrincado personaje. Buena dirección de Daniel Marcove que, con una sobria escenografía nos transporta a esas deseadas playas que se hacen vívidas para el espectador fundamentalmente a partir de la imaginería de los actores. En ese marco ideal se desarrolla este encuentro catártico de dos argentinos por el mundo, atravesado por el humor y a su vez por una honda reflexión sobre la Argentina que nos duele.
Funciones:
Teatro El tinglado
Sábados 20 h