En mi calidad de directora de un medio de comunicación como EL INCONSCIENTE y en mi carácter de psicoanalista – siendo que el psicoanálisis está absolutamente comprometido con los derechos humanos – y, en nombre del equipo de nuestra revista, considero una necesidad ética intentar poner palabras a la grave situación que venimos viviendo en Argentina. El dolor que sufre la familia Maldonado es del orden de lo innombrable y de lo siniestro, y  todos aquellos que sentimos a Santiago como “nuestro”, estamos conmocionados por su muerte. El “otro” es uno. Santiago puede ser cualquiera de nosotros o alguien que amamos.

Queremos dejar por escrito nuestro repudio al tratamiento que desde el día de su desaparición hasta estos últimos días, desde la aparición de su cuerpo hasta la fecha, han manejado la mayoría de los medios de des-in-formación. Mensajes subliminales, de-formación y manipulación para “formar” opinión en la población y utilizar a Santiago como una puesta en escena electoral.

Hoy seguimos escuchando hipótesis descabelladas, burlas y falta de respeto hacia la familia de Santiago, pese a que en un comunicado oficial es explícita en su pedido: “…Necesitamos saber qué le sucedió a Santiago y quiénes son los responsables de su muerte. Todos. No sólo quienes le quitaron la vida sino los que, por acción u omisión, colaboraron en el encubrimiento y perjudicaron el proceso de búsqueda.

Estábamos en lo cierto al reclamar por la inacción, ineficacia y parcialidad del Juez anterior en la tramitación de la causa. Nos sigue resultando inexplicable la negativa del Gobierno Nacional ante el ofrecimiento de colaboración de expertos de la ONU, de comprobada experiencia internacional. Nadie podrá sacarnos de la cabeza que se podría haber hecho mucho más y mucho antes.

A los medios de comunicación, a las organizaciones sociales, de derechos humanos, gremiales, a las personas que nos han acompañado en las marchas por Santiago, les pedimos que sigan manteniendo el reclamo por Justicia, con más fuerza que nunca y en paz”.

Sin embargo, los medios de in-comunicación no parecen sensibilizarse ni siquiera mInimamente con esta demanda y este pedido de solidaridad. Por el contrario, continúan manejando hipótesis que se replican y que una gran parte de los argentinos repiten de manera automatizada.

Es importante saber que los medios de difusión representan al amo, sea cual fuera al partido político al cual responden, y los esclavos son todos aquellos que se alienan repitiendo su discurso como un slogan televisivo.

Para seguir construyendo y enriqueciendo nuestro imaginario social y cultural, es indispensable una sociedad que logre hacer consciente aquello que opera en las mentalidades a nivel inconsciente. Es fundamental que sepamos que los medios intentan imponer los discursos del poder que conforman una red compleja en el mundo entero, se trata de un sistema perverso que obtura la capacidad de pensar y la constitución de la subjetividad.

El deseo más potente que sostiene nuestra línea editorial, es la de promover y estimular a través de todas las producciones de la psiquis humana (arte, literatura, psicología, etc.etc.etc.) –  la libertad de pensar.

Es importante poder de-construir todo tipo de información pre-metabolizada que profundice lo que se está generando: un abismo ético y moral insondable en nuestra sociedad que fragmenta aún más nuestro lazo social hasta llegar a pulverizarlo.

Pensemos y reflexionemos apuntando a formar una sociedad más libre. La libertad nos hace responsables de la búsqueda de la verdad. Esto implica el no sometimiento a elucubraciones discursivas que ocultan, bajo un manto de desinformación, aquello que duele o se prefiere ignorar. Las desapariciones son el costado más oscuro y terrible de nuestra historia y el Inconsciente colectivo se iluminó al poder saber.  No permitamos NUNCA MAS que se disfrace la verdad para  no repetir nuestro pasado – ya que el Inconsciente retorna siempre – es la condición de posibilidad de proyectar un futuro posible.

EL INCONSCIENTE pugna por saber y estamos junto a tu familia, Santiago.

¡EL INCONSCIENTE PRESENTE!

Dra. Raquel Tesone

22/10/2017