ARTE/INICIO/TEATRO

CALOR (versión payasa de Bodas de Sangre) – Dramaturgia: Lucía Schaab y Luis Levy – Por Lic. Mariana Wassner

¿Es posible plantear una tragedia como Bodas de sangre, de Federico García
Lorca, en clave de clown?
No sólo es posible, es una propuesta original e interesante para entender ciertas
cuestiones de la condición humana. Una obra que se desarrolla en un escenario con mesitas
en las que el público puede compartir bebida y una picada mientras disfruta de esta pieza teatral. Así,
desde dentro pero con la cercanía/ distancia que se necesitan para enterarse de
los acontecimientos.

Bodas de Sangre transcurre en un pueblito de España en el que La Novia y El
Novio están prontos a desposarse. Aparece Leonardo en la vida de La Novia, y
ambos huyen. Son perseguidos por El Novio, y lo que iba a ser una celebración,
termina siendo un baño de sangre y muerte bajo la luz de la luna.

Lucía Schaab, magnífica, siempre en complicidad con el público, ingresa al
pequeño escenario como una testigo dispuesta a contar qué sucedió esa fatídica
noche, a condición de que el público, nosotros, nos retiremos finalizado su relato,
para poder limpiar el lugar.

Y así, muy a la manera shakespeariana, y como si estuviéramos en un tablao,
alguien, desde afuera, narra una historia de amor, de matrimonios arreglados y del
honor en juego.

La actriz de este unipersonal realiza todos los personajes: el padre de La Novia, La
novia, El Novio, la madre del Novio, Leonardo, la mujer de Leonardo con una
fluidez asombrosa. Cambios en las miradas, en los tonos de voz, en las sonrisas, en
la gestualidad, en los movimientos, dan vida a esta pieza hasta que el
erotismo de los amantes se hace presente. 

Es para reír, es para llorar, pero sobre todo, para acompañar y formar parte de esta comunidad que mira (y juzga).
Caben señalar no sólo la buena iluminación sino la magnífica musicalización,
acorde, a tiempo, que acompaña cada momento de la obra en cada momento de
cambio en la tensión dramática: fados, música latina, rimbombantes, estruendosas,
que se suman a la dirección y puesta general para aplaudir.

Resulta interesante que jamás se pierde el hilo de la historia y que, aunque alguien
no haya leído el original de García Lorca, comprende de qué se trata: la cuestión del
honor está en juego y el deshonor con sangre se paga.

Amena, sensible, inteligente, CALOR (versión payasa de Bodas de Sangre)
muestra, una vez más, que el humor, aquel que surge de la angustia profunda,
salva. Y esta obra, a la que le queda una sola presentación, también y esperamos que se reponga pronto. 

Teatro Gargantúa
Jorge Newbery 3563, CABA
Domingos 20.00hs
Por Alternativa Teatral

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.